5 consejos de nuestros fisioterapeutas para recuperarte de los excesos en Navidad.
Antes que nada, esperamos que hayáis pasado una feliz Navidad y que viváis un 2022 lleno de salud y, sobre todo de gran bienestar.
No es ningún secreto que durante estas fechas no sólo tendemos a excedernos en algunos caprichos como las compras, las convivencias y desde luego, las cenas; que son los grandes protagonistas de los excesos en Navidad.
La verdad es que desde la primera semana de diciembre muchos estamos comprometidos a sufrir los excesos en Navidad. Desde las cenas de empresa, las cenas entre un grupo y otro de amigos y finalmente la cena de Nochebuena, la comida de Navidad, la celebración de Noche Vieja y para rematar, el roscón de Reyes.
Nuestras recomendaciones para que mantengáis vuestro descanso en equilibrio a pesar de cambiar vuestros horarios de sueño, es que hagáis descansos considerables y regulares haciendo alguna siesta a media tarde o antes de cenar. Lo más importante es que mantengáis 6 horas de sueño como mínimo. Antes de ir a dormir, podéis beber un vaso de agua para oxigenar el cerebro y liberar toxinas durante el sueño.
Durante las festividades navideñas también es muy común hacer uso de ciertas prendas que tienden a reducir la zona del abdomen principalmente. El uso de estas prendas en combinación con uno de los principales excesos en Navidad, la comida, puede ser catastrófico.
El uso de una faja reductiva durante la digestión y en una misma posición genera una compresión extrema que puede perjudicar la digestión del cuerpo bloqueándola y podría causar falta de respiración, sofocamiento, agotamiento, inflamación e incluso posibles desmayos.
Nuestra recomendación es que consideréis una vestimenta cómoda y holgada que os facilite bienestar durante las festividades.
El consumo de azúcares industriales y alcohol son uno de los principales excesos en Navidad. Los turrones, roscones, polvorones, chocolates y demás postres característicos en estas fechas tienen como ingrediente principal el azúcar refinado.
Estos azúcares afectan al organismo aumentado la acidez y la inflamación del tejido conjuntivo, provocan hipoglucemia y crean hipersensibilidad en las glándulas suprarrenales. La acidez a su vez, provoca dolor dorsal y favorece a la colonización intestinal disminuyendo la actividad del sistema inmune.
El consumo excesivo de alcohol puede provocar tensión nerviosa, irritabilidad o insomnio que afecta a la calidad del sueño.
Esperamos que nuestros consejos os sean de mucha ayuda y os recordamos que todo el equipo de Clínica Company os espera con los brazos abiertos para ayudaros a recuperar vuestro bienestar y vuestro equilibrio tras los excesos en Navidad.