Te contamos qué es en realidad el estrés y cómo reducirlo con fisioterapia.
A lo largo del día todos nosotros nos enfrentamos con una o mas situaciones estresantes que, si no se detectan y controlan a tiempo, poco a poco pueden ir desequilibrando nuestro bienestar en general y provocarnos graves enfermedades. Nuestro objetivo es que aprendáis a reconocer una situación estresante, el tipo de estrés y cómo reducirlo a con fisioterapia. Pero…
¿Sabemos qué es en realidad el estrés y conocemos verdaderamente los riesgos que tiene para nuestra salud?
Muchos pacientes llegan a nuestra clínica buscando una solución ante fuertes dolores de cabeza, espalda o cuello que se ocultan tras frases como: “habré dormido mal” o “habrá sido un mal gesto”, sin conocer que la situación desencadenante de estas dolencias son los procesos de estrés. Para evitar y reducir el estrés debemos entender su origen, sus tipos y sus causas para así detectarlo y controlarlo a través de la fisioterapia.
Lo más importante del estrés es saber que en realidad no es algo negativo, de hecho, tiene una razón biológica de existir y esa es la de mantenernos alerta ante una situación de emergencia e incluso de supervivencia.
¿Qué es el estrés?
El estrés es una reacción de nuestra mente y nuestro cuerpo provocada por factores de origen físico o psíquico que resultan altamente demandantes y desafiantes de los que, además, se pueden derivar emociones de frustración, furia o nerviosismo.
La finalidad de esta respuesta biológica a esos estímulos es la de cambiar los procesos químicos y físicos de nuestro cuerpo haciéndole liberar hormonas, tensionando los músculos o aumentando el ritmo cardiaco de la persona afectada ante la reacción estresante. Cabe señalar que esta reacción bien puede ser el resultado de una situación física como ser víctima de un ataque o un accidente o bien puede ser el resultado de situaciones psíquicas y emocionales como terminar una relación sentimental, perder el empleo, pasar por un duelo o exigirse más de lo normal a si mismo.
Los diferentes tipos de estrés y cómo reducirlo con fisioterapia:
Estrés positivo y negativo.
El estrés positivo se presenta en aquellas situaciones en que la vida no está en peligro de supervivencia, pero el cuerpo requiere de mayor motivación para adaptarse a un cambio como lo sería hacer un examen, cambiarse de casa o dar una presentación ante un público.
El estrés negativo sucede cuando la misma sensación del estrés positivo se vuelve más intensa y duradera manteniéndose incluso, cuando ya no existe situación para estresarse y además dificulta el desempeño intelectual y el comportamiento de los pacientes.
Estrés agudo o reversible.
Se trata de un estrés a corto plazo, es el más común y es el que sufre la mayoría de los pacientes que acuden a ver a un fisioterapeuta. Los principales síntomas emocionales que se sufren ante un cuadro de estrés agudo son la irritabilidad, ansiedad y depresión. El estrés agudo también puede presentar síntomas a nivel físico que derivan en dolores y tensiones musculares, dolores de cabeza, migrañas, espalda, mandíbula o afecciones en tendones y ligamentos. Muchos pacientes también sufren de dificultad para respirar, elevación de la presión sanguínea, palpitaciones o dolor de pecho. Y en otros casos, los pacientes sufren alteraciones del sistema digestivo que pueden desencadenar cuadros de estreñimiento, diarreas, acidez, flatulencias o síndrome del intestino irritable.
Estrés crónico.
Este tipo de estrés aparece cuando los síntomas del estrés agudo se viven durante un largo tiempo prolongado e incluso los pacientes terminan acostumbrándose a padecer ciertos dolores y situaciones como la pérdida de la fuerza y los reflejos, el cansancio crónico, entumecimiento, rigidez, irritabilidad constante, obesidad, problemas de la piel como acné o eczema, problemas menstruales, insomnio o depresión. Este tipo de estrés es altamente peligroso porque podría originar enfermedades irreversibles como insuficiencia cardíaca, diabetes o presión arterial alta.
Reconocer el tipo de estrés y cómo reducirlo con fisioterapia.
Lo más importante es saber identificar los síntomas del estrés y entender que cualquier dolencia tiene muchas soluciones que podemos aplicar a través de la fisioterapia a base de tratamientos adecuados y personalizados para que los dolores desaparezcan y con ellos evitar la aparición de enfermedades graves.
Durante las sesiones de fisioterapia manipulamos ciertos puntos del cuerpo ayudando a favorecer la liberación de endorfinas y consiguiendo que nuestros pacientes disfruten de una sensación de bienestar al instante. Nuestro trabajo como fisioterapeutas es actuar sobre el sistema nervioso a través de la relajación y distensión muscular liberando bloqueos emocionales intrínsecos en el cuerpo.
Gracias a técnicas como la masoterapia, el ultrasonido, la magnetoterapia, la punción seca o la electropunción ayudamos a reducir el estrés reduciendo al mismo tiempo la tensión muscular, la presión arterial y el cansancio mientras mejoramos la concentración, la sensación de bienestar y aumentamos la vitalidad y en general la actitud positiva de nuestros pacientes.
En Clínica Company
Ofrecemos, además, las herramientas de relajación y ejercicios físicos adecuados para ayudar a cada uno de nuestros pacientes a conseguir un equilibrio saludable entre su mente y su cuerpo previniendo así, la aparición de cuadros complicados y prolongados de estrés y por supuesto, de futuras enfermedades.
